Hablamos con la señora Forcadell (CF), miembro del Consejo de Administración de FORCADELL y su hija Mireia Vila (MV), actual Gerente y miembro del Consejo de Administración de FORCADELL, dos generaciones de mujeres -concretamente la segunda y tercera generación de la Empresa- que han formado y forman parte respectivamente de la dirección de la consultora inmobiliaria FORCADELL.
La Organización de las Naciones Unidas declaró el 8 de marzo el Día Internacional de la Mujer a raíz de un incendio que hubo en una fábrica de camisas en Nueva York en 1910 donde murieron 146 personas: 123 mujeres y 23 hombres. Este incendio marcó el inicio de la lucha por los derechos de la mujer. Cómo ha cambiado, por suerte, el papel de la mujer a la sociedad y en el mundo laboral desde semillas. Señora Carme, ¿podría hacer una mirada atrás en el mundo laboral?
CF: Haciendo una mirada atrás, pensando en mi trayectoria, tengo mucho a agradecer a mis padres. Mi madre era una activista militante, ella fue quién me abrió el camino. Era una defensora de los derechos y del papel de la mujer. Y a mí, sinceramente, me lo puso muy fácil: con 21 años me saqué el título de administradora de fincas y empecé a trabajar. También pienso que gracias a ella, y también a mi padre, esta era una empresa avanzada a su época donde la mujer tenía un papel importante. Hablo de los años sesenta. No obsante hay que decir que, haciendo una mirada más crítica, también teníamos nuestras limitaciones, de las cuales quizás antes no éramos conscientes. En aquel tiempo era impensable, por ejemplo, que una mujer viniera a trabajar en pantalones. Era otro concepto, otra época.
Mireia, ¿y una mirada a la actualidad?
MV: Haciendo una mirada hacia la actualidad, y concretamente a nuestra Empresa: creo que es profundamente necesario en el mundo laboral la diversidad. La diversidad, tanto a nivel cultural como de género y de edad son valores claves y enriquecedores en una empresa. Y así lo creemos a FORCADELL. De hecho, sin buscar ni forzar la paridad, nos hemos dado cuenta que tenemos un equipo de Consejo Directivo totalmente paritario. Y para mí es muy importante este hecho porque pienso que hoy en día la mujer no tiene tantas dificultades para encontrar trabajo, el handicap principal es que, en muchas empresas, está excluida de los ámbitos de decisión, de aquellas posiciones que implican liderazgo. Y estoy orgullosa porque aquí a FORCADELL, esto sería impensable.
¿Qué pensáis de aquellos equipos liderados por mujeres?
MV: De hecho yo no creo que un estilo directivo venga dado por el género. Viene dado por la persona. Para mí cada persona tiene un estilo de dirigir y de liderar. La estructura ideal por una empresa es aquella que se enriquece de la complementación y cohesión de los dos géneros. No me gustaría tampoco una empresa liderada solo por mujeres, me faltaría la parte masculina. Las personas que lideran los diferentes equipos de FORCADELL, están en estas posiciones por su valía y capacidades, nunca por su género.
Según un estudio publicado esta semana por el Observatorio Social de La Caixa, las mujeres tienen un 30% menos de probabilidades que los hombres de ser contratadas...
CF: Es una discriminación ilógica e incomprensible. Además, otro hecho que me ha sorprendido del estudio es que el perfil preferido ha sido lo de hombres con hijos, descartando también los que no tenían. Me sorprende que las empresas vean a un hombre con hijos como una persona responsable e implicada, pero no vean el mismo en el caso de la mujer.
MV: Creo que para lograr la conciliación familiar se tiene que hacer un cambio de mentalidad transversal. Que tanto la empresa como los trabajadores, hombres y mujeres, apuesten de manera igualitaria por la conciliación familiar, puede ayudar a evitar estas discriminaciones. Si los hombres cogieran más reducciones de jornada o bajas por paternidad quizás esta injusticia no la continuarían sufriendo solo las mujeres.
Dicen que una mujer empoderada es aquella que se encuentra en primera línea, sea en el ámbito social, político y laboral. Es una mujer que se encuentra en ámbitos de decisión por su valía, capacidad o formación y que, quizás sin saberlo, está sirviendo de referente por otras mujeres.
CF: Yo me siento una mujer empoderada, compaginé un trabajo que implicaba dedicación y esfuerzo con mi familia y vida social. Salía a las 18h del trabajo, iba a buscar a mis hijas a las actividades extraescolares, y tengo la suerte de decir, que de mi grupo de amigas, todas también estudiaron y van también compaginar buenos trabajos con una vida llena familiar y socialmente. Pero entiendo que esto no pasaba a todos los entornos. Nosotros habíamos estudiado al Liceo Francés y íbamos a clases mixtas, que por aquellos tiempos todavía estaba poco viste. Así que vuelvo a decir, que en gran parte fue gracias a la mentalidad avanzada de mis padres.
MV: Exacto, sin duda las mujeres, chicas y niñas de hoy en día, además de ejemplos y referentes, necesitan que tanto en el ámbito de la educación como en el familiar se espere de ellas un futuro profesional ambicioso. Todavía se mantienen ciertos estereotipos a la sociedad, por ejemplo, donde se espera de los niños que sean ingenieros, médicos y empresarios y de ellas que sean guapas, princesas y, como mucho, administradoras o farmacéuticas.
CF: Aun así tengo que decir que el recorrido que se ha hecho hacia esta lucha también lo tenemos que valorar. Se ha hecho mucho, y podemos estar orgullosas, pero no bajemos la guardia, todavía queda mucho para hacer.
MV: Totalmente de acuerdo, es un cambio cultural que tenemos que ir tirando todos y todas. En casa, en la calle, a la familia, con los amigos y como hoy estamos viendo, en el mundo laboral.
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