La pandemia ha llevado a cabo un cambio de paradigma en cuanto al futuro de los locales comerciales. Este sector ha sido uno de los principales afectados por la crisis sanitaria. Las restricciones de movilidad, la menor afluencia de peatones en las calles y la caída del turismo agravan la situación produciendo un aumento de locales vacíos en ciudades como Barcelona. Teniendo en cuenta que ya se trataba de un sector afectado en los últimos años por el auge del comercio electrónico, actualmente el mercado de locales está adoptando una nueva tendencia: el cambio de uso.
La situación del mercado residencial se encuentra en un punto de recuperación tras la crisis. Debido al incremento de la tasa de vacunación, el mercado va camino a recuperar los resultados pre pandémicos. En Barcelona, el problema viene derivado de la poca oferta de viviendas de segunda mano. La ciudad requiere de inmuebles para comercializar, por este motivo, se contempla como solución el cambio de uso de local a vivienda.
Esta transformación parece un proceso sencillo, pero no lo es. Para que el proyecto sea viable y se permita su desarrollo, es necesario cumplir con la normativa que lo regula. Bárbara Veciana, Directora de FORVI, la oficina técnica de FORCADELL, destaca que “para que un local pueda ser legalmente una vivienda necesita disponer de una cédula de habitabilidad y que para obtenerla, se tiene que cumplir un proyecto de licencia de cambio de uso. En Barcelona, se trata de una licencia de obra mayor”.
Según Bárbara, “el primer paso consiste en realizar una consulta al departamento de urbanismo para verificar que el edificio en cuestión admite una vivienda en la planta baja y que no se ha superado el índice de ocupación del edificio, el llamado POUM”. En segundo lugar, se requiere la redacción del proyecto de cambio de uso, donde queden plasmados todos los trabajos que se realizaran así como la justificación del cumplimiento de la normativa de accesibilidad, habitabilidad, salubridad y anti incendios.
¿CUÁLES SON LOS REQUISITOS?
Cabe recalcar que los requisitos básicos de habitabilidad para poder hacer la conversión son: Altura mínima inferior a 2,5 metros, un mínimo de 36m² útiles (40m² construidos), capacidad de ventilación natural para las estancias como la cocina, salón y dormitorio principal, una cámara higiénica separada y dependiendo del distrito, los metros mínimos de longitud de la fachada.
Una vez finalizadas las obras, se requiere la redacción del final de la obra, realizar una cédula de habitabilidad de primera ocupación y posteriormente obtener la licencia, rectificar los datos catastrales y por último, realizar una escritura frente un notario.
Si le interesa conocer más en profundidad todos los aspectos sobre el cambio de uso, no dude en pedir asesoramiento al equipo de profesionales de FORVI, la oficina técnica de FORCADELL. Son expertos en rehabilitación de edificios, obras y reformas en viviendas de particulares.
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